Una salsa perfecta para darle un toque dulce y ahumado a tus platillos favoritos.
Ingredientes
- 1 cebolla
- 3 dientes de ajo
- 50 g de salsa kétchup
- 2 cucharadas de pasta de tomate
- 50 g de azúcar moreno
- 2 cucharadas de salsa inglesa
- 2 cucharadas de miel
- Sal al gusto
- Pimienta negra molida al gusto
- Aceite de oliva (cantidad suficiente)
Preparación
1– Preparar los ingredientes:
Pela, lava y corta la cebolla en cuadritos muy pequeños. Haz lo mismo con los dientes de ajo, picándolos finamente.
2-Sofreír la cebolla y el ajo:
En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla y el ajo y sofríe hasta que la cebolla esté transparente y el ajo desprenda su aroma.
3- Caramelizar el azúcar moreno:
Agrega el azúcar moreno a la sartén y cocina a fuego lento hasta que comience a caramelizarse. Remueve constantemente para evitar que se queme. Retira del fuego.
4-Mezclar los ingredientes en la licuadora:
Vierte el contenido de la sartén en una licuadora. Añade la salsa kétchup, la pasta de tomate, la miel y la salsa inglesa.
5– Procesar la mezcla:
Licúa todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea. Prueba y ajusta el sabor con sal y pimienta negra molida al gusto.
6– Refrigerar la salsa:
Vierte la mezcla en un recipiente de vidrio con tapa y refrigérala durante al menos 1 hora para que los sabores se intensifiquen.
7- Servir y disfrutar:
Pasado el tiempo de refrigeración, tu salsa barbacoa con miel está lista para acompañar carnes, pollo, costillas o lo que prefieras. ¡Buen provecho!
¡Prepárala hoy mismo!
Sorprende a tu familia y amigos con esta deliciosa salsa barbacoa casera. Comparte tus resultados dinos cómo la disfrutaste.