Ingredientes:
- 1 Kilogramo de Harina de fuerza
- 1 Cucharadita de Sal fina
- 2,5 Tazas de Agua tibia
- 2 Cucharadas soperas de Aceite de oliva
- 30 Gramos de Levadura fresca
Preparación:
- Activación de la levadura:
- En un recipiente, mezcla el agua templada con la levadura fresca. Deja reposar unos minutos hasta que la levadura se disuelva y active.
- Preparación inicial:
- Agrega la sal fina y las dos cucharadas de aceite al agua con levadura. Mezcla bien para integrar todos los ingredientes.
- Incorporación de la harina:
- Coloca la harina de fuerza en forma de volcán sobre una superficie limpia. Vierte la mezcla líquida en el centro del volcán de harina.
- Amasado:
- Comienza a amasar la mezcla hasta obtener una masa homogénea y elástica, que no se pegue en las manos y sea manejable. Esto puede tomar unos 10-15 minutos de amasado.
- Reposo de la masa:
- Forma la masa en una bola, córtala en 4 partes iguales y forma bolas individuales con cada una. Colócalas en un recipiente enharinado, tápalas con un paño limpio y déjalas reposar durante 45 minutos, o hasta que dupliquen su volumen.
- Formado de las pizzas:
- Espolvorea harina sobre una superficie plana. Toma una bola de masa y extiéndela con las manos desde el centro hacia los bordes, dándole forma redondeada. Puedes usar un rodillo si lo prefieres para obtener una masa más fina.
- Preparación final:
- Coloca la masa extendida sobre una bandeja para pizza enharinada. Agrega la salsa de tomate y los ingredientes de tu elección.
- Horneado:
- Precalienta el horno a la temperatura más alta (al menos 230°C). Hornea la pizza durante aproximadamente 10-15 minutos, o hasta que la masa esté dorada y los ingredientes estén cocidos.
- Servir:
- Retira la pizza del horno, córtala y sírvela caliente. ¡Disfruta de tu deliciosa pizza casera!
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